CUÉNTAME ARMANDITO

ABELARDO OVIEDO

Aunque no trascendió, el colectivo técnico nacional deseaba lograr tres objetivos en la Copa de las Américas de Baloncesto, clasificación femenina, celebrada hace una semana en Hato Mayor, República Dominicana.
Uno de ellos, obtener uno de los tres visados que confirió la cita para el campeonato mundial 2006. El otro, devolverle el revés a Argentina, elenco que superó a nuestro equipo en un torneo brasileño. El tercero, y por último no menos importante, cortar la cadena de derrotas ante Brasil.
Ellos alcanzaron su empeño. En la tercera fecha de la justa continental aseguraron el boleto mundialista, tras doblegar a Argentina. Y sobrepasaron a Brasil en la despedida para concluir invictas.
El éxito frente a las brasileñas tiene alcance. Desde 1989 ningún conjunto del país derrotaba a las auriverdes en la Copa de las Américas.
El DT Armando Acosta está satisfecho con la actuación de sus alumnas en tierra dominicana y, en primera instancia, ofreció su parecer sobre el triunfo frente a las sudamericanas: “Desarrollamos una minuciosa preparación para enfrentarlas, porque es un adversario cuyas jugadoras se equivocan muy poco en el partido, debido al oficio adquirido. Decidimos emplear varios tipos de defensa. Unas veces utilizamos el marcaje por zona 2-3; en otras, zona 1-1-3; más tarde, presión desde la mitad y en todo el terreno. Pienso que las molestamos bastante con esa variabilidad a la defensa”.
El técnico eludió ser categórico cuando le preguntamos si había finalizado allá la preponderancia de las aurvierdes sobre las caribeñas: “ No debo predecir el futuro. Puedo asegurar que esa victoria representa mucho, pues nuestras atletas se percataron de que las sudamericanas no son invencibles cuando el contrincante realiza una ofensiva estable. Este alcance nos favorece psicológicamente para los venideros enfrentamientos, y confirma que podemos ser uno de los cuatro mejores del mundo. Brasil pertenece a ese nivel desde hace varias temporadas”.
Para muchos Argentina es el equipo revelación de la región. Algunos consideran que las albicelestes se convertirán en rivales de mayor profundidad en este cuatrienio. Armandito apunto: “Han mejorado mucho su nivel de juego con respecto a otras campañas. Cualquier contrincante debe mostrar buena concentración a la defensa para doblegarlas, porque las jugadoras que se desempeñan desde el perímetro son muy eficientes. En el torneo por invitación de Brasil esas muchachas nos encestaron doce canastas de tres puntos (36 unidades) y en República Dominicana nueve. El buen manejo del balón les permite apostar a esa táctica. De esa forma compensan el déficit de estatura que tienen las jugadoras cercanas a la canasta”.
El entrenador cubano aceptó pasar revista a los restantes elencos participantes en el certamen regional: “Las atletas de Puerto Rico dominan muy bien los fundamentos del deporte. Las de menor talla son efectivas en los lances de media y larga distancia. La gigantes no son tan fuertes en la lucha por los rebotes”.
“El equipo de Canadá, apuntó, es joven pero de muchas perspectivas. En su nómina figuraron dos jugadoras de experiencia, pues juegan en la liga profesional estadounidense y en Alemania. Parece un seleccionado todavía poco competitivo, pero no debemos perderlas de vista”.
“Las baloncestistas de República Dominicana están muy rezagadas con respecto a las restantes del área.”
La principal selección de la nación prosigue en uno de los entorno más importante del deporte. Figura entre las dieciséis que competirán en el clásico mundial programado para septiembre del próximo año en Brasil.
Seguramente para esa ocasión los técnicos tampoco emitirán comentarios, pero trabajarán para conquistar el tercer lugar y, así, igualar la mejor actuación de la mayor isla de las Antillas en Malasia 1990.